Bizcocho de Yogurt y Glaseado de Limón 🍋
Normalmente asimilamos el bizcocho al postre típico de las abuelas para merendar, aquella elaboración por la cual competían entre ellas haber cúal quedaba más esponjoso y sabroso.
Hoy en día la receta del bizcocho tiene mil elaboraciones distintas y se ha popularizado en todo el mundo. Ha dejado de ser un postre de casa, a ser un postre que te ponen en una cafetería, un tentempié para tomar con la merienda o incluso una elaboración de alta cocina.
Mi receta de bizcocho de yogurt la he heredado de mi abuela hace varios años, de hecho es muy sencilla y veréis que las cantidades vienen en con distinta unidad de medida a la que estamos acostumbrados.
Una contra que tiene el bizcocho es que mucha gente lo asimila a obesidad y mala alimentación. Sin embargo, es un postre como cualquiera que todos podemos comer, pero evidentemente no es para comer a diario ni tampoco comerse 5 kg. Aun así el bizcocho tiene cosas buenas.Sabías que el limón tiene propiedades adelgazantes y desintoxicantes entre otras para nuestro cuerpo?
De esta manera puede que ya no nos sintamos tan mal comiendo este bizcocho de yogur🤣🤣🤣
📌ingredientes:
- 4 Huevos medianos 1 Yogur griego
- 1 medida yogur de aceite de oliva suave
- 3 medidas de Yogur de harina
- 2 medidas de Yogur de azúcar
- Ralladura de medio limón
- 1 Sobre de levadura polvo ( 16 gr )
✏Elaboración:
Bate los huevos con el azúcar en un bol hasta que se disuelva el azúcar.
Añade el yogur y el aceite y sigue batiendo. Incorpora la ralladura de limón y mezcla bien.
Por último añade la harina tamizada y la levadura y mezcla todo bien hasta que no queden grumos.
Cuando ya tengas la mezcla, engrasa un molde mantequilla y harina y vierte la mezcla. Llévalo al horno 20 – 25 minutos a 180 grados.
📍Recuerda que para desmoldar el bizcocho debe estar frío. Mientras prepararemos el glaseado.
En un cazo al fuego medio pon 150 ml de agua, 300 gramos de azúcar glass y unas gotas de zumo de limón.
Debes cocinarlo sin que se caramelice sino que se funda el azúcar y coja un color blanquecino la mezcla. Sabrás que está cuando metas una cuchara y salga cubierta de la mezcla.
Finalmente solo tienes que desmoldar el bizcocho y bañarlo con el glaseado de limón.